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Varios lectores me han preguntado sobre el punto de vista de este blog con respecto al proceso de paz, algo que se ha convertido en la visión de muchos colombianos.

Al respecto, lo que puedo decir es que aunque celebro todos los esfuerzos por buscar la paz, no hay verdades absolutas.

Este es uno de los pilares epistemológicos de este blog. Tal vez hay verdades parciales. Tal vez hay verdades que se construyen por acuerdos que albergan a todas las verdades parciales de un momento dado. Esmás probable que estas verdades sean más sostenibles a largo plazo, que las verdades impuestas a sangre y fuego. Aquí entra otro de los pilares de este blog: La sostenibilidad.

A raíz de los dramáticos cambios de pensamiento que acompañaron a la revolución de la física de principios del siglo XX, Thomas Kuhn definió su concepto de paradigma científico como “una constelación de logros – conceptos, valores, técnicas, etc. – compartidos por una comunidad científica y usados por ésta para definir problemas y soluciones legítimos”1. Segun Kuhn, los distintos paradigmas se suceden tras rupturas discontinuas y revolucionarias llamadas “cambios de paradigma”.

Años más tarde, Fritjof Kapra generalizó esta definición a la de paradigma social describiéndolo como “una constelación de conceptos, valores, percepciones y prácticas compartidas por una comunidad, que conforman una particular visión de la realidad que, a su vez, es la base del modo como dicha comunidad se organiza”2.

Actualmente estamos viviendo una revolución del conocimiento que nos obliga a desechar muchas verdades que hasta hace poco eran irrefutables. Más que verdades, muchos filtros para percibir la realidad, que antes funcionaban, pero ya no.

Edgar Morin dice en su libro “Introducción al pensamiento complejo”: “Nunca pude, a lo largo de toda mi vida, resignarme al saber parcelarizado, nunca pude aislar un objeto de estudio de su contexto, de sus antecedentes de su devenir. He aspirado siempre a un pensamiento multidimensional. Nunca he podido eliminar la contradicción interior. Siempre he sentido que las verdades profundas, antagonistas las unas de las otras, eran para mí complementarias, sin dejar de ser antagonistas. Nunca he querido reducir a la fuerza la incertidumbre y la ambigüedad.”3

En nuestro mundo interconectado, en el que un atentado terrorista o una protesta a miles de kilómetros de distancia tarde o temprano tienen consecuencias en nuestras casas, ya sea porque se repliquen en nuestra sociedad, o por las consecuencias económicas, o porque generaron una reacción en cadena que a la larga repercute y nos azota con fuerza, no se puede continuar con el mismo paradigma de antes.

Para encontrar muchas de las soluciones a los problemas del mundo de hoy, debemos cambiar radicalmente nuestra forma de percibir la realidad y de pensar. Muchos de nuestros líderes políticos no entienden esto y por eso proponen lasmismas soluciones que antes funcionaron, con resultados desastrosos… y no entienden por qué. Ya había dicho Niels Bohr en 1932, después de la introducción del Quantum en microfísica: “Al principio, esta situación pudiera parecer muy lamentable; pero a menudo en el curso de la historia de la ciencia, si bien los nuevos descubrimientos revelaron los límites de ideas cuyo valor universal nunca se había cuestionado, fuimos recompensados: nuestra visión se expandió, y nos volvimos capaces de conectar entre sí fenómenos que, hasta entonces, podían parecer contradictorios”4

Según Capra, “Nuestros líderes no sólo son incapaces de percibir la interconexión de los distintos problemas sino que además se niegan a reconocer hasta qué punto lo que ellos llaman sus soluciones comprometen el futuro de generaciones venideras”5.

La “satisfacción de las necesidades sin disminuir las oportunidades de las generaciones futuras”6 o “sostenibilidad” es otro de los pilares sobre los cuales va a estar estructurado este blog.

Para que una verdad, o propuesta política o económica sea sostenible, debe ser aceptada por una gran mayoría en un lugar y momento dado, y no debe afectar dramáticamente a algún grupo social o al medio ambiente.

En caso de que no cumpla con estas condiciones, será el equivalente a tratar un tumor cerebral con un analgésico; es probable que el analgésico quite temporalmente el dolor, pero no quitará la causa subyacente del dolor. Si no se hace algo al respecto, el dolor volverá cada vez con más fuerza hasta que no se pueda hacer nada.

Igual sucede con las propuestas mesiánicas de algunos líderes políticos que concentran la mayor parte de las esperanzas de un país en un solo punto.

Recuerdo como si fuera ayer, cuando cayó Pablo Escobar abatido sobre el techo de una casa en Medellín y toda Colombia celebraba con regocijo el fin del narcoterrorismo; el fin de las bombas; el final del miedo.

Años después, otros grupos armados habían llenado el vacío que dejaron los narcotraficantes y se habían fortalecido con narcotráfico. Volvieron las bombas, el terrorismo, aumentaron los secuestros y los colombianos continuaron con miedo.

Luego se desmovilizaron los grupos armados de ultraderecha y más tarde aparecieron las bacrim…

Porque el problema de la violencia no radica en concentrarse en los violentos del momento. Podremos tener mil procesos de paz exitosos o derrotar militarmente a los violentos, pero mientras no se ataquen las verdaderas raíces de la violencia: la desigualdad y la injusticia, lo más probable es que siempre habrá grupos violentos que entren a llenar el vacío que dejan los que se van.

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1 KUHN, Thomas., The Structure of Scientific Revolutions, University of Chicago Press, Chicago, 1962 – Citado por CAPRA, Fritjof. La trama de la vida. Editorial Anagrama, Barcelona, 1996, Pág 28

2 CAPRA, Fritjof. La trama de la vida. Editorial Anagrama, Barcelona, 1996, Pág 28
8 MORIN, Edgar. Introducción al Pensamiento Complejo. Editorial Gedisa, Barcelona, 2001, Pág 23

3 BOHR, Niels, Lumiére et vie, Congrés international de thérapie par la lumiere, 1932, Citado por Edgar Morin en Introducción al Pensamiento Complejo, Pág 71


4 CAPRA, Fritjof. La trama de la vida. Editorial Anagrama, Barcelona, 1996, Pág 28


5 BROWN, Lester., Building a Sustainable Society, Norton, New York, 1981- Citado por: CAPRA, Fritjof. La trama de la vida. Editorial Anagrama, Barcelona, 1996, Pág 28

6 CAPRA, Fritjof. La trama de la vida. Editorial Anagrama, Barcelona, 1996, Pág 46

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